Desde el día en que su hijo entró a clase el primer día de jardín de infantes, ha escuchado el tictac del reloj. Han pasado aproximadamente 12 años desde que extendieron sus alas y se dirigieron a la universidad. Hace tantos años, puede que hubiera parecido una eternidad. Ahora aquí están, listos para graduarse de la escuela secundaria y comenzar la siguiente etapa de la vida.
Por más emocionado que esté su hijo, esto también será un gran cambio para él. Como padre, es posible que desee brindarles alguna orientación para facilitar la transición. Continúe leyendo para conocer algunos consejos valiosos que pueden ayudarlo a usted y a su graduado a maximizar sus últimos meses antes de la universidad.
1. Realice algunos recorridos universitarios
Hay cerca de 4.000 universidades públicas y privadas que otorgan títulos en todo el país. Eso es mucho, por lo que está bien si su graduado no sabe a cuál quiere asistir en este momento. Aquí es donde entra en juego el recorrido por el campus universitario. ¡Considérelo su viaje académico por carretera!
Para hacer su lista de visitas, hable con su hijo adolescente sobre lo que quiere de la universidad. ¿Prefieren una escuela pequeña o grande? ¿Qué pasa con una ubicación rural o urbana? Puede planear visitar tantas escuelas como desee. Luego, comuníquese con cada oficina de admisiones y programe un recorrido.
La mayoría de los recorridos por el campus están dirigidos por estudiantes actuales y, en ocasiones, tendrás una sesión informativa con un consejero de admisiones. Esta es su oportunidad de obtener comentarios de primera mano sobre la escuela. Armar un lista de verificación del recorrido por el campus de cosas para ver y preguntar. Y ven preparado para aprender.
2. Solicite ayuda financiera
Cada universidad es un poco diferente. Sin embargo, todos tienen una cosa en común. Cuestan dinero. Ya sea que usted o su hijo planeen pagar la matrícula, deben completar el formulario FAFSA. Es el papeleo que le permite a su hijo solicitar ayuda financiera federal. También le brinda una estimación de cuánta ayuda puede esperar recibir.
Incluso si cree que su familia gana demasiado para calificar para recibir asistencia del gobierno, complételo de todos modos. Hay muchas otras becas que pueden requerir la documentación. Hay montones de becas y subvenciones por ahí. Investiga un poco y solicita tantos como puedas. No hay nada de malo en intentarlo.
3. Hablar de especialidades
Es posible que su hijo adolescente esté entusiasmado con los deportes universitarios o con unirse a una organización griega. La escena social universitaria puede ser genial. Sin embargo, no dejes que olviden que el objetivo es obtener una educación. Aquí es donde entra en juego una conversación detallada sobre académicos y especialidades.
Hable con su hijo sobre lo que le interesa hacer. Está bien si sólo saben que les interesan la ciencia o la música. Ayúdelos a buscar universidades que tengan programas sólidos en esas áreas. Es más probable que su hijo tenga una gran experiencia si elige una universidad con un programa que le guste.
4. Practica la escritura
Incluso si su hijo planea concentrarse en matemáticas o en un idioma extranjero, muchas universidades aún exigen un ensayo de admisión. Si la mejor opción de su graduado no lo hace, muchas solicitudes de becas lo harán. La universidad puede pedirles que expliquen por qué están interesados en la escuela o cómo les beneficiará una beca. La pregunta podría incluso ser más amplia y preguntarles sobre una experiencia memorable e impactante.
Es importante estar preparado para cualquier sugerencia de escritura. Por lo tanto, trabaje con su hijo adolescente para practicar la escritura sobre una variedad de temas. Ayúdelos a aprender a organizar sus pensamientos y anímelos a utilizar un lenguaje descriptivo. Está bien si escribir no es lo tuyo. Comunicarse con uno de sus maestros también es una opción.
5. Trabaje con un consejero de escuela secundaria
Puede ser divertido ayudar a su hijo adolescente a prepararse para la universidad. Sin embargo, con tanto en qué pensar, es posible que se sienta un poco abrumado. Si ese es el caso, comuníquese con uno de los consejeros vocacionales de la escuela secundaria. Su trabajo es ayudar a los niños a prepararse para su próximo paso académico.
Los consejeros están al tanto del proceso de solicitud de ingreso a la universidad. Pueden ofrecerle consejos sobre cómo su hijo puede mejorar sus calificaciones durante su último año. Además, pueden hablar con su hijo sobre sus intereses y posibles objetivos profesionales. Esto puede ayudar a su hijo a determinar dónde quiere postularse.
6. Concierte una cita con el médico
Incluso si su hijo goza de perfecta salud, querrá considerar programar una cita para un examen físico. Muchas universidades exigen un examen médico reciente antes de que su hijo pueda inscribirse. Hay varios vacunascomo meningitis y hepatitis B, que a menudo son necesarios para asistir a la universidad.
También es importante que su hijo tenga una copia de su historial médico más actualizado. Una cita con el médico es un buen momento para solicitar resurtidos de recetas. De esa manera, su hijo tendrá todos los medicamentos que necesita antes de salir de casa.
7. Vaya a comprar suministros
¡Ahora viene la parte realmente divertida! Comprar lo que su hijo necesitará para la universidad es comprar lo mejor para la escuela. No importa si viven en casa o se mudan a un dormitorio. Habrá mucho que comprar. Tenga en cuenta que no será el único que buscará artículos, así que no se demore.
Lo más importante es asegurarse de que su hijo tenga los útiles que necesitará para clase. Carpetas, cuadernos, una mochila y una agenda son algunos de los elementos esenciales. Si se mudan a un dormitorio, considere buscar en línea la lista de equipaje de la universidad. Anime a su hijo a comunicarse y coordinarse con su compañero de cuarto, si tiene uno. Así no tendrán dos de cada electrodoméstico. Haga todo lo posible para que la nueva habitación de su hijo se sienta como en casa.
Comenzar la universidad puede ser emocionante. Sin embargo, hay muchas cosas que implican asegurarse de que su hijo esté listo. Si tiene en cuenta estos consejos, su nuevo estudiante de primer año entrará con confianza al campus cuando comiencen las clases.